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lunes, 22 de junio de 2015

La teoría que nunca murió















Escrito por Sharon Bertsch McGrayne y publicado en 2012 por Editorial Crítica, dentro de la serie Drakontos (de la cual tengo bastantes libros). El original es del 2011, así que esta vez no han pasado muchos años entre el original y la traducción al español.

Sobre la autora, no puedo comentar mucho, el que quiera más información que le eche un vistazo a la web que he marcado antes, que yo no sabía nada de ella, así que tengo que reconocer que el libro me lo compré por el subtítulo del mismo: "De cómo la regla de Bayes permitió descifrar el código Enigma, perseguir submarinos rusos y emerger triunfante de dos siglos de controversia". La verdad es que, a los que hemos estudiado la regla de Bayes, esto nos llama la atención. No hay que olvidar que en los estudios se ven pocos ejemplos prácticos de verdad (quizás hoy en día, con los ordenadores actuales se vean más, pero en mi época de estudiante universitario, los ordenadores de la facultad había que pedirlos con hora y programarlos en Fortran, ejem). Durante los cursos de doctorado en Inteligencia Artificial fue cuando comprendí la importancia del Teorema de Bayes ya que ahí se usaba prácticamente en todas partes (casi aunque no quisieses).

No quiero hacer una disertación sobre el teorema en sí, pero para los que no sepan qué es lo que dice, hay un vídeo en Youtube que lo explica bastante bien (éste) y otra web en la que dan algunos ejemplos más (ésta). Por resumir un poco para aquellos que no quieran ver nada de lo anterior, decir que el Teorema de Bayes se usa para entre otras cosas para, sabiendo que un suceso tiene una probabilidad a priori, calcular una probabilidad revisada del mismo o a posteriori. Y éste es el argumento central del libro y el que une los distintos capítulos (por otra parte independientes entre sí), la lucha entre los estadísticos frecuentistas y los partidarios de la regla de Bayes (por otra parte desarrollada posteriormente por Laplace entre otros), y toda esa lucha se centra en las probabilidades a priori, aceptadas por unos y rechazadas por otros.

Mientras nos cuenta la lucha entre los dos bandos, el libro nos sumerge en multitud de eventos en los que incluso los que rechazaban la regla de Bayes se vieron obligados a trabajar con ella para intentar obtener soluciones a problemas realmente serios. Entre otros, en el libro dedican parte de un capítulo  (dentro del capítulo: "Las pesquisas de la armada") a la localización de la bomba de hidrógeno perdida en Palomares, a la localización de submarinos perdidos, pero también a sus aplicaciones en la medicina, la criptografía, la toma de decisiones en tiempo real, los buscadores de internet, la traducción simultánea, en fin, lo que comentaba en un principio, que al final, cuando se miran las cosas con detalle resulta que una regla tan sencilla como el Teorema de Bayes (y los árboles de decisión) están en prácticamente todas partes en nuestra vida cotidiana. Por supuesto las cosas pueden complicarse todo lo que queramos (como bien nos comentan en el libro, con el método Montecarlo, las cadenas de Markov y todas las variantes y mezclas de los mismos).

Creo que merece la pena leerlo porque está increíblemente bien documentado, bastante bien escrito (bueno, con una excepción, que a mi lo de usar "teorético" en vez de "teórico" no termina de gustarme, pero es una cuestión personal) y describe hecho ocurridos hace realmente poco tiempo y que la gente que estudiábamos esas cosas no nos dimos cuenta de que estaban pasado (bueno, al menos yo), de hecho no sabía que se empezaron a celebrar conferencias bayesianas en Valencia (1979) para reunir a los pocos bayesianos que había en el mundo. Son 471 páginas, más un par de anexos, que no tienen dificultad técnica y que se pueden leer bastante bien.

Como siempre, copio un trocito:
"Para apoderarse de un libro de códigos, el capitán de corbeta Ian Fleming - que andando el tiempo habría de ser el creador de James Bond pero que en esos años servía como ayudante del jefe de la Dirección de la Inteligencia Naval británica - elaboraría la llamada "Operación Inflexible". El plan concebido era digno del espía que él mismo habría de lanzar a la fama durante la posguerra. La idea de los británicos consistía en dotar a un avión alemán capturado en combate de una tripulación en la que figurara una persona que hablase perfectamente la lengua alemana (y esa persona habría de ser el propio Fleming, que había estudiado dicho idioma en Austria durante su juventud). Después, la aeronave fingiría estrellarse en las aguas del Canal de la Mancha a fin de ser rescatada por un buque nazi. Una vez a bordo, los falsos germanos tomarían el control del barco, poniendo rumbo a Inglaterra con todo el equipo asociado con las máquinas Enigma y llevándoselo directamente a Turing. La aventura sería minuciosamente planeada, pero terminaría cancelándose, de modo que Turing y Twinn se presentaron ante Birch con el aspecto "de dos empresarios de pompas fúnebres a quienes se les hubiese hurtado el disfrute de un magnífico cadáver [...] y sudando a la gota gorda a causa de la angustia".

Clasificación:
Facilidad de lectura: 1
Opinión: 3-4 (está bastante entretenido aunque son muchas páginas, pero es que hay mucha historia que contar)

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