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miércoles, 18 de mayo de 2022

Seis piezas fáciles

 

Escrito por Richard P. Feynman y publicado por Editorial Crítica dentro de la colección Drakontos de bolsillo (al menos el libro que tengo yo) en el 2007 (la edición que tengo en mis manos, hay otras anteriores desde el 2002, y el original se corresponde nada más y nada menos que al año 1963).

Del autor no voy a decir nada, que ya lo he dicho todo en bastantes entradas anteriores, Para mi es uno de los grandes del siglo XX, aunque reconozco que no soy objetivo porque le tengo mucho cariño al personaje.

El libro que tengo cuenta con una introducción de Paul Davies, del cual sorprendentemente no he comentado nunca ningún libro (me lo apunto para intentar hacerme con alguno de ellos, que bastantes tienen muy buena pinta) y dos prefacios (muy cortitos, uno de David L. Goodstein y Gerry Neugebauer y otro de Feynman.

Sobre el libro, lo mejor que puedo hacer  para explicar de qué trata es copiar directamente un párrafo de la contraportada: "Este libro que reúne las partes menos técnicas de un curso introductorio para los estudiantes del Instituto Tecnológico de California, sirve a la vez como una introducción a la física para los no científicos y como una introducción al propio Feynman" y por añadir algo y que quede aún más claro, decir que estas seis lecciones se han sacado del gran clásico "Lectures on Physics" (que es todo un clásico, pero con un nivel más técnico).

Para comentar de qué va el libro, voy a enumerar los seis capítulos y así quedará mucho más claro: "Átomos en movimiento", "Física básica", "La relación de la física con las otras ciencias", "La conservación de la energía", "La teoría de la gravitación" y "Comportamiento cuántico".

Con eso yo creo que queda muy claro. Está escrito de forma bastante sencilla y que se entiende muy bien (aunque haya algunas partes con fórmulas). Puesto que hace un repaso por casi toda la física (aunque no entra en detalles porque insiste en que los detalles se irán viendo en capítulos posteriores), habla de casi todas las cosas normales en estos casos, como el principio de incertidumbre de Heisenberg, la constante de estructura fina (el famoso 137), la conservación de la energía ("Establece que hay una cierta magnitud, que llamamos energía, que no cambia en los múltiples cambios que que sufre la naturaleza. Esta es una idea muy abstracta, porque es un principio matemático; dice que hay una magnitud numérica que no cambia cuando algo sucede"), las tres leyes de Kepler, el principio de inercia de Galileo, el experimento de Cavendish para medir el valor de G, y de muchas otras cosas ya conocidas o no, como el epitafio de Stevinus (aunque no entra en su demostración). También dice una cosa muy curiosa sobre las matemáticas (que yo no había pensado así nunca): "La matemática no es una ciencia desde nuestro punto de vista, en el sentido de que no es una ciencia natural. La prueba de su validez no es el experimento".

Resumiendo, que realmente son seis piezas fáciles (los detalles complicados se quedan para capítulos posteriores de sus Lectures), en 173 páginas divididas en las introducciones ya comentadas y seis capítulos, que se pueden leer de uno en uno de forma muy relajada. Un libro que merece la pena y que además es un clásico del que una vez leído podremos opinar con algo de fundamento.

Como siempre, copio un trocito:

"Nos gustaría resaltar una diferencia muy importante entre la mecánica clásica y la cuántica. Hemos estado hablando de la posibilidad de que un electrón llegue en una circunstancia dada. Hemos dado por hecho que en nuestro montaje experimental (o incluso en el mejor montaje posible) sería imposible predecir exactamente lo que sucedería. ¡Sólo podemos predecir las posibilidades! Esto significaría, si fuera cierto, que la física ha abandonado el problema de tratar de predecir exactamente lo que sucederá en una circunstancia definida. ¡Sí! La física ha abandonado. No sabemos cómo predecir lo que sucedería en una circunstancia dada., y ahora, creemos que es imposible, que lo único que puede predecirse es la probabilidad de sucesos diferentes. Hay que reconocer que esto es un retroceso en nuestro ideal primario de comprender la naturaleza. Quizá sea un paso atrás, pero nadie ha visto la forma de vitarlo".

Clasificación:

Facilidad de lectura: 2 (hay un par de fórmulas).

Opinión: 4-5 (un clásico de los que hay que leer).

miércoles, 4 de mayo de 2022

Desde la nada

Escrito por Gerd Binnig y publicado por Galaxia Gutenberg en 1996 (el original es de 1989).

Este es un libro que me compré seguramente a los pocos años de publicarlo y que tenía por casa sin leer por eso de que no conocía de nada al autor. Hace poco volví a echarle un ojo y viendo que era un premio Nobel de física decidí que merecía la pena leerlo (aunque no siempre sea así, que una cosa es saber mucho de un tema y otra muy distinta saber explicarlo).

Hay un prólogo de José Manuel Sánchez Ron, que, como casi todo lo que escribe merece la pena (no digo todo, porque no me he leído todo lo que ha escrito y no tengo muy claro que se pueda hacer, jeje).

Siempre resulta curiosa la forma de pensar de la gente inteligente (que aunque parezca que no, gracias a Dios, tenemos a mucha entre nosotros) acerca de temas aparentemente tan alejados de sus áreas de experiencia y darse cuenta de que muchos de ellos tienen un pensamiento muy similar sobre ellos mismos y sobre lo que hacen. Sin ir más lejos pongo tres ejemplos, en el primero el autor dice: "En realidad nunca he llegado a ser un buen físico. No me encuentro inmerso en la física, sino que la veo desde fuera", que es un tipo de pensamiento muy en la línea del de Mlodinow. En el segundo: "la capacidad de pasar vergüenza se adquiere a base de práctica en quedar en ridículo". Y en el tercero: "no deberíamos dejarnos desanimar. Cuando se intenta ser creativo, uno se da siempre el batacazo".

El libro trata de lo que reza el subtítulo: "sobre la creatividad de la naturaleza y del ser humano". Es un ensayo sobre lo que entiende el autor que es la creatividad humana y la de la naturaleza (siempre dejando claro que los humanos somos parte de la naturaleza y que no le gusta la distinción habitual entre natural y artificial) y tal y como nos indica él, se va viendo a lo largo del  libro cómo va modificando parcialmente su opinión según va pensando sobre el tema. Digamos que va definiendo lo que entiende por evolución y va juntando esa definición con la de la creatividad, diciendo algo así como que "la evolución siempre puede representarse por medio de una pirámide de complejidad" y que "la creatividad consiste en posibilitar el crecimiento sobre esas pirámides", y el mismo va dejando a esas ideas evolucionar (de hecho comenta que es posible que nuestras leyes físicas se transformen continuamente) y se adentra en las simulaciones Monte Carlo, el comportamiento caótico de la curva logística, la sinergética (de hecho menciona un libro que ya hemos comentado con anterioridad: éste) y en el mundo de los fractales (de hecho habla de que esas pirámides son fractales).

Por supuesto hace muchas referencias a su vida y a los trabajos que le condujeron a ganar el premio Nobel, pero como el mismo dice, no lo hace para presumir, sino porque él estaba allí y puede hablar de eso de primera mano. Sólo hay un capítulo un poco más técnico que es el que se titula: "Las leyes físicas son leyes evolutivas", pero no tiene una dificultad excesiva, y el último capítulo es realmente entretenido y con un aire a algunos escritos de Feynman.

Resumiendo, 310 páginas que se leen bien, pero no de forma rápida, que hay algunas cosas que son complejas (y otras autorecurentes, jeje).

Como siempre, copio un trocito:

"Así que nosotros mismos tenemos que plantearnos los interrogantes y por supuesto con ayuda de métodos establecidos, pero también hemos de intentar paso a paso acercarnos a una respuesta por medio de métodos, en parte modificados o nuevos. Ésta es la forma infantil de aprender. Es aprender por curiosidad, aprender por medio del ensayo. Para mí ésta es la única manera razonable de aprender. En la naturaleza, el aprendizaje también se realiza de este modo, sólo que todavía no hemos llegado a comprenderlo. El lector puede cebar un ordenador con conocimientos, al fin y al cabo el pobre idiota (el ordenador) no sabe qué hacer con todo eso. Ahí está parado sin hacer nada; nada, por falta de mando. No puede hacerse él mismo las preguntas, en todo caso todavía no".

Clasificación:

Facilidad de lectura: 2-3 (hay partes un poco liosas para seguir el razonamiento)

Opinión: 2-3